Cascos Carretera

El casco de bicicleta de carretera: aerodinámico y ligero

Un casco de bicicleta de carretera es un elemento clave para protegerte en caso de caída. La forma del casco es aerodinámica y debe cubrir toda la cabeza desde la frente hasta el cuello para proteger la columna vertebral. Para una protección segura y eficaz, debe cumplir con la norma europea CE EN 1078, que está inscrita en el interior. Varios elementos contribuyen a la comodidad de un casco de bicicleta de carretera: la ligereza, el sistema de ventilación (los orificios permiten ventilar el cráneo durante el esfuerzo) y el sistema de ajuste del casco, casi siempre con una rueda en la parte trasera. Las espumas del interior del casco ayudan a ajustar la talla y proporcionan comodidad.

Casco de bicicleta: nuestros consejos

Es importante conocer la talla de tu cabeza para encontrar un casco de carretera adecuado. Los detalles reflectantes te aportarán la máxima seguridad, serás visto con cualquier clima y de noche.

Se recomienda cambiar el casco cada 5 años, o incluso antes si lo utilizas a menudo.

Si te caes, es importante que cambies el casco, aunque el impacto no haya sido violento, puede estar agrietado por dentro, por lo que ya no estás debidamente protegido.

El precio de tu casco de carretera variará en función de los materiales elegidos para su fabricación: PVC, policarbonato o ABS para la cubierta exterior con la posibilidad de un refuerzo de carbono. Refuerzo de aramida, nylon, kevlar o carbono para la estructura interior.

Los diferentes tipos de cascos de bicicleta de carretera

Los casco de carretera con una forma aerodinámica y bien ventilada.
Los cascos de contrarreloj y de triatlón llamados "cascos aerodinámicos" con una forma muy aerodinámica y una ventilación que permite que el aire se deslice sobre la cabeza y se beneficie así de una mejor aerodinámica.
Los cascos de ciclismo de pista con las mismas características que los cascos de contrarreloj.